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Weretilneck: "No voy a firmar aumentos que la provincia no pueda pagar"

El gobernador de la vecina provincia, manifestó que no concederá aumentos salariales a empleados públicos que la provincia no pueda sostener. Esto, en el marco del aumento significativo del costo de vida y una disminución de los ingresos provinciales.

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EL DIARIO digital

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En un comunicado, el gobernador Alberto Veretink aclaró su posición sobre las exigencias de aumento de salarios para los funcionarios públicos, subrayando que no es realista conceder aumentos que el Estado no puede soportar financieramente.

En un mensaje dirigido a los residentes de Río Negro, Weretilneck delineó el complicado panorama económico, atribuyendo la responsabilidad a las políticas implementadas por el gobierno nacional, bajo la administración de Javier Milei.

El gobernador expuso cómo el costo de vida se ha disparado en un 71% recientemente, con aumentos significativos en los precios de los combustibles, tarifas de servicios públicos y transporte, además de una notable caída del 27% en las ventas. Según el gobernador, este contexto afectó no solo a los trabajadores sino también a las finanzas provinciales, que han visto reducida su coparticipación nacional en un 14%, equivalente a la pérdida de más de 34 mil millones de pesos desde diciembre.

enfrentan los funcionarios públicos, especialmente a la luz de las crecientes demandas de mejores salarios, especialmente por parte del sector de la salud, pero advirtió que es imposible ofrecer soluciones milagrosas.

 Reiteró su compromiso con el diálogo y la búsqueda de respuestas, pero dijo que será siempre en el marco de la responsabilidad fiscal. 

"Tengo una obligación y una cuestión moral, que es tratar desde el punto de vista salarial a todos los empleados públicos de la provincia de la misma manera", señaló Weretilneck, descartando la posibilidad de asumir compromisos financieros insostenibles. "No voy a ser el responsable de que la provincia quiebre", enfatizó, recordando las consecuencias de crisis anteriores.

El Gobernador anticipó que los próximos meses serán difíciles y reiteró la importancia del diálogo y la tolerancia en estos tiempos complicados.

 Pero dejó en claro que existen límites a la capacidad del gobierno estatal para abordar las quejas, especialmente del sector de salud pública.

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