Violencia en Defensorías: planteos del SiTraJ a Procuración y el STJ

El Sindicato de Trabajadores Judiciales advirtió que "tanto el Superior Tribunal de Justicia, como la Procuración, tienen que garantizarle a los compañeros la seguridad en su trabajo". Así lo planteó la secretaria general Susana Funes tras la decisión de acotar la atención personal en Defensorías por una serie de incidentes y episodios violentos registrados en el organismo.

"Desde el sindicato que se escuche a los trabajadores y que se compre un scanner manual para detectar los metales. Si eso le va a dar la seguridad a los compañeros, es lo que tienen que hacer", dijo Funes.

La gremialista indicó que "para los compañeros de las defensorías, esto es el día a día, ellos atienden a un sector de la sociedad que viene con planteos, denuncias, reclamos, que tienen que ver con cuota alimentaria. Estos compañeros siempre han tenido una atención profesional y empática, pero son la primera trinchera en un contexto adverso y estos son los compañeros que atienden a estas personas y en muchos casos tratan de calmar, pero la gente cuando ingresa a la Defensoría no entiende que esos trabajadores no toman las decisiones".

Añadió que "hay muchas cosas para hacer, el sindicato está dispuesto a trabajar con el STJ y la Procuración general, pero también necesitamos esa escucha, que abran el juego y trabajemos en conjunto en pos de los trabajadores. Sin ir más lejos, cuando planteamos temas en las paritarias nos cortan la mitad del paritario y tiene que ver con esas cuestiones, poder sentarnos en una mesa la patronal y el sindicato para darle solución a los trabajadores".

Funes apuntó en Radio Kermés que "lamentablemente se ha dado otro hecho de violencia en la Defensoría y el Defensor ha tomado esta decisión para darle a los trabajadores un marco de protección, están atendiendo pero no al público como lo harían en una jornada laboral cotidiana, se ha restringido un poco el acceso para garantizar a los compañeros su seguridad en el día de trabajo. Hay un acceso más reducido dentro de lo que es la Defensoría".

Aclaró que "como en cualquier parte del edificio judicial hay guardia, pero no hay requisas. Hay un locker, donde las personas dejan sus carteras y suben, pero la realidad que se plantea es que cualquier persona que ingresa puede llevar cualquier cosa en su bolsillo y pasa desapercibido".