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Colegio Santo Tomás: abandono y una cuota que supera los 200 mil

El Ministerio de Educación conoce de cerca cuál es la situación por la que atraviesa la institución. Malestar por el "maltrato" que baja desde la Fundación. La versión de las máximas autoridades.

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EL DIARIO digital

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La crisis edilicia y los problemas de gestión que arrastra desde hace varios años la Fundación que maneja el Colegio Santo Tomás en Santa Rosa iba a estallar en cualquier momento. Y estalló.

El estado de abandono con el que conviven a diarios las y los estudiantes, sobre todo en el Secundario, cuya sede funciona en el Club Belgrano, se agravó en el último tiempo: filtraciones, bancos rotos, falta de sillas, baños sin luz por temor a los que alumnos se electrocuten y hasta un pésimo funcionamiento de la caldera, aparecen entre varios de los problemas cotidianos.

Además,  a esos reproches de la comunidad educativa en general, ahora se sumó un fuerte malestar por el ajuste en la cuota que cobra el colegio privado: un 90% de aumento que llevará el valor por encima de los 200 mil pesos mensuales en el caso de los que cursan inglés intensivo.

La situación fue planteada el año pasado por una comisión de padres a los integrantes de la Fundación, presidida por Mauricio "Yoyi" Ferretti. En la gestión, a Ferretti lo acompañan la vice Mónica Bigorito, la tesorera Nora Cudugnello y la secretaria Sandra Ramírez.El Ministerio de Educación también conoce de cerca cuál es la situación por la que atraviesa el colegio. Lo sabe puntualmente Marcela Feuerschvenger, tanto como subsecretaria y como ministra de Educación. Se lo plantearon en más de una reunión la comisión de padres y la propia Fundación mediante una nota por escrito que en su momento se elevó el ministro Pablo Maccione durante el año pasado antes de que finalizara la primera gestión del gobernador Sergio Ziliotto.

El conflicto estuvo subyacente durante algunos meses. Pero ahora el malestar comenzó a circular en los grupos de Whats App de los diferentes grados por la falta de respuestas de las autoridades de la institución educativa ante el estado de las instalaciones.

"Los baños están inundados y sin luz porque hay riesgo de electrocución y la mampostería se cae a pedazos", señaló un grupo de padres y madres que habló con El Diario.

"Tienen que estudiar con las camperas puestas y todavía no se nos vino el invierno. Y como si fuera poco, decidieron aumentarnos en un 90% la cuota", agregaron y aportaron fotos y videos de incidentes cotidianos.

"Los chicos y chicas no cuentan ni siquiera con papel higiénico. No hay ni lo más básico. La desidia es total y las quejas entran por un oído y salen por el otro", aseveraron.

Los malos manejos administrativos también habrían desencadenado, por ejemplo, en que el laboratorio dejara de usarse por la "falta de insumos", denunciaron los padres.

"Está todo mal. Estamos hablando de uno de los colegios privados con la cuota más alta de Santa Rosa", reprocharon.

A todo eso hay que sumarle la respuesta destemplada, a modo de "maltrato", que suele bajar en reiteradas ocasiones desde la Fundación cada vez que una familia realiza un planteo: "hay otras opciones en la ciudad", responden.

"Las reformas están en marcha"

Ante el conflicto latente, este diario consultó al presidente de la Fundación, Mauricio Ferretti. "Las reformas están en marcha, pero están tardando un poco más de lo deseado. Los tiempos de los alumnos no son los mismos que los del Club Belgrano", dijo el máximo responsable del lugar.

Y explicó: "nosotros somos inquilinos... no podemos hacer cambios estructurales en el lugar. Pero lo que sí hicimos fue sentarnos con el Club Belgrano, acordar un fuerte aumento del alquiler y a partir de ahí el club se comprometió a resolver todos los problemas edilicios".

"Entre los problemas más estructurales está en de la electricidad en los baños, que se hizo una conexión por afuera y falló... por eso hubo que cortar la luz", reconoció.

Ferretti también se refirió a la situación de las calderas: "Están obsoletas... hay tres calderas y falló una de ella, que ya no se puede arreglar. El Club Belgrano supuestamente inició los contactos con el Ministerio de Educación para resolver esto", subrayó.

"Nosotros, los integrantes de la Fundación, no cobramos ni un peso, trabajamos ad honorem… somos padres, tenemos hijos en el colegio. Podemos equivocarnos en algunas cosas, pero tratamos de hacer lo mejor", completó.

- Hay un planteo de las familias por el valor de la cuota. ¿De cuánto fue la actualización?, se le consultó a Ferretti.

-La explicación tiene que ver con la inflación, con el aumento de los costos de funcionamiento. La inflación anual, que nosotros la tomamos de mayo a mayo, fue de casi el 280% y nosotros actualizamos en un 240%, más del 30% por debajo. Incluso con un alquiler que nos cuesta un 800% más.

- ¿Cuál es la ayuda que reciben del Ministerio de Educación?

- El ministerio no nos aporta todos los sueldos como se dice. La institución afronta el pago de sueldos, aguinaldos y cargas sociales de todos los docentes de inglés, de los porteros, de la planta adicional y de un sexto, a diferencia del Colegio Domingo Savio y del Colegio María Auxiliadora, a quiénes sí el Estado le paga los dos sextos pero a nosotros no. Es decir, la Provincia aporta lo básico y no de todos los cursos, a diferencia de lo que ocurre con Domingo Savio y María Auxiliadora. Habíamos pedido reuniones, pero están pendientes... todavía no nos atienden.

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