"Mi número de celular lo tiene todo el mundo"
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EL DIARIO digital
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La pretensión opositora de dar de baja la ordenanza que prevé como obligatoria la revisión técnica vehicular caerá en saco roto: el intendente Luciano di Nápoli no piensa dar marcha atrás con esa normativa, aprobada durante la gestión anterior.
El planteo lo habían hecho en forma conjunta el radicalismo, el PRO y el tiernismo, que pidieron además que se dé por caída la licitación para esa tarea, que fue convocada y en la que se presentó una sola empresa, ITV S.A., oriunda de Río Negro.
Concejales y concejalas oficialistas recibieron la bajada de línea de no expresarse públicamente sobre el tema, mientras el jefe comunal les dejó en claro que no habrá recálculo. Luciano di Nápoli incluso dio a entender que entre los y las ediles lo que había era un "lobby".
La concejala radical María Luján Mazzucco fue una de las que defendió el pedido de suspensión de la RTO. Hubo dos grandes argumentos opositores: por un lado, el impacto económico que tendría ese trámite en el actual contexto, por otro que "la ciudad aún no cuenta con la estructura vial adecuada".
"No es el momento oportuno, está en riesgo la transitabilidad de los ciudadanos y los vehículos. Y la ordenanza también es una carga económica. Fue prorrogada la emergencia sanitaria en la ciudad hasta 2025, esto incluye también intervenciones de lo que es infraestructura sanitaria y estructura vial", dijo.
Mazzuco aclaró que el funcionamiento conjunto de los bloques no justicialistas "no es antiperonismo", sino que "trabajamos en los mismos proyectos en favor del vecino".
Respecto de la licitación, cuestionó que a la empresa "se le quiere dar exclusividad por 20 años; pedimos que se prioricen las empresas pampeanas y que el dinero se quede en la provincia. Nosotros tenemos gente muy buena e interesada en poner estos talleres", añadió, pero no hubo ninguna otra firma que participara de la licitación.
