Conductor se durmió y volcó en la Ruta Provincial 9
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EL DIARIO digital
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General Pico (Agencia) – El juicio oral y público por el caso de las graves heridas sufridas por Paula Pinedo en Intendente Alvear, tras un confuso episodio, tuvo ayer por la mañana un inicio convulsionado, donde se intentó dejar fuera del debate a la Querella que busca demostrar que existió un intento de femicidio.
La mamá de Paula Pinedo ofreció un desgarrador testimonio donde dejó clara la violencia del acusado, Jonathan Iván Moyano, mientras que la hermana de la víctima aseguró que "era una muerte anunciada" (ver aparte).
Tal como se preveía por el desarrollo de la investigación, el primer día de debate del caso Pinedo no transcurrió por los carriles normales de otros juicios.
A las 8:30 horas de este jueves, fuera de los Tribunales, se apostaron militantes feministas mientras el interior del edificio era fuertemente custodiado por uniformados enviados por la URII, que debían resguardar lo que ocurría fuera de la sala y no prestar servicio al acusado porque éste no era un detenido y llegaba allí en libertad.
Sin embargo, uno de esos policías irrumpió en el debate cuando la mamá de Paula declaró y comenzó a gritarle a Moyano.
Desde la Oficina Judicial, y también el fiscal Luciano Rebecchi -en tono altanero-, le adelantaron al cronista de este medio que no podría ingresar a la sala a cubrir el juicio, siendo que allí dentro no había un delito de instancia privada a debatir, sino el resultado de un siniestro vial, tal como lo elevó la Fiscalía.
Finalmente, los jueces Gianinetto, Pellegrino y Pagano confirmaron lo que se sabía, el debate era público, por lo que vecinos y periodistas ingresaron.
Pero el hecho más sorprendente se dio al momento de los alegatos, luego que la querella que representa a la madre de la víctima, reiteró que, para ellos, el hecho que se juzga se trató de una "tentativa de femicidio", aunque en la sala se juzgaran "lesiones gravísimas culposas".
La defensa de Moyano afirmó que las abogadas de la mamá de Paula pretendían "forzar otra acusación con hechos inexistentes" y pidió la "exclusión del juicio" de dicha parte.
El Jurado se tomó un cuarto intermedio y consultó luego las posturas de las demás partes intervinientes, para luego resolver que dicha querella podía continuar en el debate, pero ajustándose a la figura de "lesiones gravísimas" para garantizar el derecho a defensa, más allá que al término del proceso se impugne su resultado.
Alegato fiscal
El fiscal Rebecchi recordó que el siniestro vial ocurrió en las primeras de la tarde del 6 de febrero de 2022, cuando Paula Pinedo se desplazaba en moto, una Motomel Max, por una calle de tierra de Intendente Alvear, siendo perseguida de cerca por una camioneta Ford Eco Sport conducida por su pareja, Jonathan Moyano, a quien acompañaba una de las hijas en común.
En ese contexto, indicó que "la damnificada pierde el control de la motocicleta y termina cayéndose al suelo" y agregó que "a raíz de esa caída, la víctima sufre lesiones de gravedad".
Relató que ese día Moyano y Pinedo discutieron en la casa que compartían y el hombre se fue a la casa de su madre con sus dos hijas, pero minutos más tarde Paula Pinedo va hacia esa vivienda y allí mantienen una nueva pelea, que termina con la mujer yéndose en su moto con rumbo a la ruta y Moyano la persigue en la camioneta.
A pesar de elevar el caso como un siniestro vial, Rebechi mencionó en su alegato de apertura que "vamos a probar que a lo largo de esa relación existían episodios de violencia física y psicológica por parte del imputado hacia la damnificada".
El abogado Jerónimo Altamirano, querellante en representación del papá de Paula, adhirió a la acusación fiscal.
Además, señaló que "no puede perderse de vista el contexto de violencia de género en el que ocurrió el accidente". Dijo que la pareja vivió por años en un "contexto violento".
Víctima de violencia
A su turno, la querellante que representa a la mamá de Paula, María José Ortega, recordó que la víctima es una mamá de cinco hijos (dos de Moyano cuya custodia está a cargo de una hermana de Paula), que "espera justicia en una cama". Pinedo se encuentra internada en una clínica de la ciudad de Buenos Aires, en estado vegetativo.
Remarcó que la damnificada fue por años víctima de violencia, denunciada reiteradas veces y luego levantadas en sede policial hasta que no quedaron constancias, pero que familiares y vecinos conocían la situación y no la manifestaban por temor.
La abogada querellante aseguró que la primera testigo en llegar al lugar del siniestro escuchó de boca de la víctima "me pegó", en referencia a Moyano, y esas fueron sus últimas palabras. Ortega apuntó en esa línea que "las lesiones no se condicen con una caída en moto a 25 km en calle de tierra", aunque admitió que "no hay registro de 10 a 15 minutos" ocurrido el hecho, para remarcar que "sí tenemos el resultado". Y ratificó sobre la conducta de Moyano que "el acusado aterrorizaba a Paula".
Defensa
El abogado Agustín Cobreros, defensor de Moyano, alegó que su cliente "no actuó con negligencia" y en ese sentido rechazó los dichos de la Fiscalía al asegurar que "no la seguía de cerca".
La defensa del acusado no agregó mucho más, ya que de inmediato el abogado atacó la posición de la querella que interpreta que se trató de una tentativa de femicidio. Recordó que el caso que se juzga con "lesiones gravísimas culposas", consideró que la abogada intentaba "agregar otra acusación con hechos inexistentes" y pidió la exclusión de la parte del debate, situación que el Jurado tras un cuarto intermedio no otorgó.
Culminados los alegatos, el debate continuó con los testimonios de la madre y una de las hermanas de la víctima (ver aparte) y la reproducción de las Cámaras Gessel realizadas a los hijos de Moyano y Pinedo.
El debate, programado en seis jornadas, se reanudará el próximo martes 22 de noviembre.
