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EL DIARIO digital
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La Pampa fue una de las tres provincias del país que finalizó el 2022 con déficit primario, en este caso del 0,7%. Las otras dos fueron Buenos Aires y San Luis. En promedio, el conjunto de provincias y la Ciudad de Buenos Aires cerraron 2022 con una mejora en el perfil de sus cuentas públicas, con superávits primario, financiero y operativo mayores que los de 2021 en términos reales. El déficit primario es la diferencia entre los gastos corrientes de un Estado y su recaudación de impuestos.
Según un informe de la consultora, Politikon Chaco, se verifica que son tres las provincias con déficit primario y seis las que cerraron con rojo financiero. Respecto al resultado primario, la primera mejora que se observa es que en 2021 fueron cuatro los distritos con déficit y en 2022 son tres. Estas fueron La Pampa (-0,7% del gasto primario), la provincia de Buenos Aires (-1,3%) y San Luis (-1,7%).
Por el contrario, en las otras veintiún jurisdicciones el resultado primario arrojó superávit, siendo los más abultados (siempre en relación con sus gastos primarios) el de la CABA (16,9%), Santiago del Estero (11,5%) y Córdoba (11,0%). En los primeros dos casos, se observa una mejora respecto al 2021, mientras que en el tercero fue algo menor al del año previo.
De estos distritos con superávit primario, trece mejoraron sus resultados en comparación con el 2021, incluyendo a tres que en ese año registraron déficit primario (Río Negro, Misiones y Catamarca).
Por el contrario, ocho distritos mantuvieron sus superávits primarios, pero reduciéndolos en relación con sus gastos mientras que otros dos pasaron de superávit en 2021 a déficit primario en 2022 (La Pampa y San Luis); la provincia de Buenos Aires, por su parte, incrementó levemente su déficit (de -1,2% de 2021 a -1,3% en 2022).
Respecto al resultado financiero, como se mencionó previamente, fueron seis las provincias con déficit, el mismo número que se observó en 2021 pero con diferentes protagonistas.
Entre los distritos con superávit financiero en 2022, las que mostraron mayor holgura en las mismas son las mismas tres que se detallaron para el caso de los resultados primarios: CABA con un superávit financiero equivalente al 11,7% de sus ingresos totales; Santiago del Estero (10,5%) y Córdoba (9,0%). Al igual que para el resultado primario, CABA y Santiago del Estero mejoraron sus resultados (en mayor medida en el caso porteño que tuvo déficit en 2021) y Córdoba lo desmejoró.
CABA no fue el único distrito que pasó de déficit financiero en 2021 a superávit en 2022: también lo hicieron Misiones y Catamarca.
Por el contrario, tres provincias pasaron de superávit a déficit: La Pampa, San Luis y Neuquén, tres de las seis provincias que cerraron el año con rojo financiero. Las otras tres son La Rioja, Río Negro y provincia de Buenos Aires, que ya habían registrado déficits en el 2021 son la salvedad de que en los primeros dos casos se achicó el mismo, mientras que en el caso bonaerense creció levemente.
Producto Bruto
Otra forma de medir los impactos de los resultados provinciales es en relación con sus PBG (tal como se hizo con el consolidado de las 24 jurisdicciones respecto al PIB).
Si bien no existe una medición oficial de los productos provinciales para el año 2022, el mismo puede estimarse a partir de un cruzamiento de diferentes variables y usado como referencia para la evaluación de los resultados.
En esa línea, Santiago del Estero y Jujuy lideran ese ranking con un superávit primario que equivale al 2,4% de sus PBG; más atrás le siguen Córdoba, Mendoza, Corrientes, Tucumán, Formosa, CABA, Entre Ríos, Catamarca y Salta con valores entre 1,0% y 1,6% y el resto de las provincias con superávit por valores debajo del 1%. Por su parte, entre los distritos con déficit primario, los de La Pampa y Buenos Aires representan el -0,2% de sus productos y el de San Luis, -0,4%