Milei denunció por calumnias e injurias a otros cuatro periodistas

Tras denunciar a Julia Mengolini, el presidente tomó la misma medida contra Jorge Rial, Fabián Doman y Mauro Federico por el mismo delito.

Tras haber denunciado esta semana a la periodista Julia Mengolini por injurias, el presidente Javier Milei amplió su ofensiva judicial contra representantes de la prensa y presentó nuevas denuncias por el mismo delito contra Jorge Rial, Fabián Doman y Mauro Federico, todos vinculados al canal de streaming Carnaval, y contra Nicolás Lantos, periodista de El Destape Web, a quien además acusa de calumnias.

Las nuevas querellas recayeron en dos juzgados distintos: una en el Juzgado Criminal y Correccional Federal N.º 10 y otra, identificada con el expediente 2660/2025, en el Juzgado N.º 9.

Estas acciones se suman a la denuncia presentada recientemente en el Juzgado Federal N.º 7, a cargo del juez Sebastián Casanello, contra Mengolini, y que fue patrocinada por el abogado Francisco Oneto. En esa causa, Milei la acusa por declaraciones realizadas en medios y redes sociales referidas a su vínculo con su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. Según el escrito, la periodista habría incurrido en afirmaciones con "dolo" e "indiferencia hacia la veracidad", lo que se encuadra —según la querella— en el principio de "real malicia".

Como respaldo, el equipo legal del mandatario incluyó una entrevista en la que Mengolini conversa con el constitucionalista Andrés Gil Domínguez sobre el uso del término "incesto", lo que para la acusación demostraría conocimiento del impacto de sus dichos. "Queda claro que la querellada entiende que sus afirmaciones en mi contra son muy graves, porque causan un daño que no se puede reparar solo con una respuesta pública, sino que requieren acciones legales como esta", señala el escrito judicial.

No es la primera vez que el jefe de Estado recurre a este tipo de medidas contra periodistas. Hace dos meses había denunciado a Carlos Pagni, Ari Lijalad y Viviana Canosa. En el caso de Pagni y Lijalad, la Justicia desestimó las acusaciones, argumentando que sus expresiones estaban amparadas por la libertad de prensa y el interés público.

Las nuevas denuncias reavivan la tensión entre el Gobierno y parte del periodismo, en un contexto de creciente confrontación entre el presidente y distintos medios de comunicación.