Empieza la tercera
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EL DIARIO digital
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Uno de los partidos más destacados de la cuarta fecha de la Fase Liga de la Champions League se disputó en el Riyadh Air Metropolitano, donde el Atlético de Madrid recibió al Union St. Gilloise con la obligación de ganar para no comprometer su futuro en la máxima cita de Europa.
Las derrotas frente al Arsenal y al Liverpool dejaron al Colchonero en una posición incómoda; y para mantener la esperanza de clasificar directamente a los octavos de final sin necesidad de pasar por el repechaje debía imponerse frente al conjunto belga.
Para intentar imponer condiciones, Diego Simeone presentó al Aleti con la ofensiva compuesta por la sociedad interpretada por Julián Álvarez y Antoine Griezmann, pero a la dupla le costó generar ocasiones de peligro ante la gigantesca presencia de Kjell Scherpen, el arquero neerlandés de más de dos metros de altura.
Cuando el panorama parecía complicarse, Pablo Barrios recuperó una pelota en su propio territorio y lo puso a correr a Giuliano Simeone, quien apeló a su velocidad hasta abastecer a la Araña. Dentro del área, el cordobés dominó y resolvió con una volea potente que se abrazó a la red. La figura que más asistencias dio a lo largo de toda la temporada habilitó a al goleador con pasado en River Plate y Manchester City para llevar tranquilidad a la capital ibérica.
Antes del descanso, la estrella francesa que supo conquistar la Copa del Mundo de 2018 tuvo el segundo en sus pies; pero una posición adelantada de Álex Baena en el inicio de la jugada obligó al VAR a ahogarle el grito al ex Barcelona y Real Sociedad.
En el complemento, cuando Kevin Rodríguez amenazaba con la posibilidad del empate, Conor Gallagher capturó una serie de rebotes generados por Alexander Sorloth y la colgó del ángulo para liquidar el trámite. Con la ventaja de dos goles, era todo felicidad en la casa del Atlético de Madrid.
De todos modos, en el tramo final del compromiso el conjunto liderado por David Hubert impuso el suspenso gracias a una pelota parada ejecutada por Sofiane Boufal. El marroquí apeló a su exquisita pegada para buscar el segundo palo de Jan Oblak y Ross Sykes se elevó dentro del área albirroja para festejar el descuento. Con el partido roto, de ida y vuelta, en los últimos diez minutos podía pasar cualquier cosa.
A pesar del sufrimiento innecesario, el conjunto del Cholo logró su segunda victoria en el certamen continental, pero todavía debe seguir remando para las plazas que entregan boletos directos a los octavos de final, dado que quedó en el puesto 15 de la tabla de posiciones. El último gol de Marcos Llorente le puso cifras definitivas al 3 a 1, que no reflejó el desarrollo del encuentro.
El Union St. Gilloise, en cambio, quedó afuera de todo con 3 puntos que lo dejaron en el puesto 26. De todos modos, en Bélgica son conscientes de que han hecho una producción digna y que si logran mantenerse en ese camino podrán lograr el objetivo.
