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Épica revancha de Los Pumas en Sídney

Un triunfo con garra y polémicas arbitrales los catapulta a la pelea por el Rugby Championship.

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EL DIARIO digital

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En un partido que hizo sufrir a la Argentina hasta el último suspiro, Los Pumas lograron su esperada revancha ante Australia en el Allianz Stadium de Sídney, imponiéndose por un ajustado 28-26. El equipo dirigido por Felipe Contepomi, que completó un primer tiempo extraordinario y superó un segundo tiempo lleno de adversidades, incluyendo una tarjeta amarilla y polémicos fallos arbitrales, se aferra a la posibilidad de pelear por el Rugby Championship, tal como lo hicieran en 2024.

Primer tiempo arrollador

Los Pumas salieron a la cancha en Sídney con una lección aprendida de la semana anterior, ajustando las clavijas y empalmando con lo mejor de aquel primer partido en Townsville. El XV de Contepomi mostró un juego pragmático y disciplinado en defensa, sumando de a tres puntos desde el inicio con la mira puesta en los palos, dejando de lado la obsesión por los tries.

Santiago Carreras, quien disputó un partido excepcional como apertura, fue la gran figura de la noche. Con decisiones inteligentes con la pelota en las manos y una eficacia infalible en sus patadas, el cordobés aportó 23 de los 28 puntos de la victoria, consolidándose como una opción sólida para la camiseta número 10. El capitán Julián Montoya, en su partido número 50, sumó el único try de Los Pumas tras un espectacular bloqueo de un free kick y una carrera digna de un back.

A pesar de que Australia reaccionó rápidamente con un try del temible Joseph-Aukuso Suaalii, Los Pumas mantuvieron la calma. Gracias a la precisión de Carreras, se fueron al descanso con una ventaja de 19-7, dominando el encuentro y aprovechando una tarjeta amarilla para Max Jorgensen.

Segundo tiempo de sufrimiento

Tras el entretiempo, Carreras continuó imparable con sus patadas, estirando la ventaja a un prometedor 28-7. Sin embargo, la historia pareció repetirse cuando el propio apertura vio la tarjeta amarilla por una jugada idéntica a la que había sacado a Jorgensen. Este fue el punto de inflexión. Australia, que hasta entonces no había encontrado su ritmo, se agigantó y metió dos tries consecutivos a través de Andrew Kellaway y Filipo Daugunu, mientras Los Pumas atravesaban su peor momento.

La "noche" se venía, pero Argentina, aunque bajó su rendimiento colectivo, encontró la fortaleza en sus individualidades. Lucio Cinti y Marcos Kremer se convirtieron en una "máquina de tacklear", frenando los embates australianos. No obstante, las polémicas arbitrales volvieron a aparecer. Los Wallabies se pusieron a tiro en el final con un try de Daugunu que, inexplicablemente, fue convalidado por el árbitro francés Christophe Ridley y el TMO, a pesar de un claro pase forward.

A la pelea por el título

Más allá de las discusiones arbitrales –que dejaron a Contepomi "enojadísimo"–, Los Pumas aguantaron la presión y lograron una victoria que quedará en la memoria. Este triunfo no solo les permite tomarse revancha, sino que los anota, igual que el año pasado, con posibilidades reales de pelear por un título del Rugby Championship que nunca han ganado.

Ahora, el equipo tendrá una semana de "descanso" para luego encarar las últimas dos fechas ante Sudáfrica. Primero, como visitantes en Durban, y en la última fecha, jugarán como locales en un escenario inusual: Londres, prometiendo un cierre apasionante para un torneo que Los Pumas están decididos a conquistar.

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