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EL DIARIO digital
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Chelsea se adueñó de la semifinal del Mundial de Clubes con una victoria convincente por 2?0 sobre Fluminense, que le abre las puertas a la gran final. El encargado de definir el encuentro fue João Pedro, autor de dos goles decisivos.
El primer golpe llegó a los 18 minutos, cuando Pedro aprovechó un centro desde la izquierda, sacó un potente remate de fuera del área y la pelota se coló en el ángulo. El brasileño no festejó por respeto a su exequipo.
La temperatura rondaba los 35?°C, y el calor intenso complicó a ambos equipos, especialmente a Fluminense, más acostumbrado a esos climas. Chelsea mostró mayor intensidad física y movilidad, apoyado en un mediocampo sólido que desactivó intentos de reacción del conjunto brasileño.
En el complemento, cuando Fluminense intentaba reaccionar, Chelsea aprovechó los espacios. A los 56 minutos, tras una recuperación profunda, el equipo inglés lanzó un contragolpe con Palmer y Fernández como asistentes, y Pedro definió con frialdad y alta precisión para sellar el 2?0.
Con ventaja clara y aire fresco en el banco, Chelsea no se relajó. La defensa se mantuvo firme, cortó los intentos de peligro y gestionó la pelota para no dejar resquicios. Fluminense, pese a algunos acercamientos, no logró vulnerar el cerrojo. Incluso un posible penal fue revisado y finalmente se anuló.
El triunfo mete a Chelsea en la final del domingo, donde enfrentará al vencedor del cruce entre Real Madrid o PSG. Además, la victoria confirma la solidez del equipo ante desafíos físicos, tácticos y ambientales.