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EL DIARIO digital
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La huella de carbono del concreto, que representa cerca del 9% de las emisiones globales, es un desafío para el sector. Frente a esa problemática, la innovación combina tierra de diatomeas un componente poroso de origen natural con un diseño geométrico inspirado en la naturaleza. Esto permite optimizar la captura de carbono y reducir el uso de materia prima.
La utilización de impresión 3D perfecciona las formas estructurales y disminuye la cantidad de cemento empleada, lo que se traduce en mayor eficiencia energética y un mejor balance ecológico del material.
Beneficios de los materiales sostenibles
El uso de componentes naturales o reciclados en la construcción favorece la disminución de la extracción de recursos y de las emisiones asociadas a la producción de materiales. Además, el diseño optimizado de estos materiales permite mejorar la eficiencia térmica y estructural, reduciendo el consumo energético para climatización o refuerzos.
Los materiales sostenibles también promueven la economía circular, al integrar residuos industriales o naturales en su composición, y pueden aportar beneficios adicionales como purificar el aire, almacenar carbono o resistir condiciones climáticas extremas.
Aplicaciones ecológicas y futuro
El concreto desarrollado en Pensilvania no solo suma capacidad de absorción de dióxido de carbono, sino que abre nuevas posibilidades de uso en proyectos de restauración ecológica. Su porosidad y diseño lo hacen adecuado para la construcción de arrecifes artificiales, plataformas marinas o sistemas de mejora del hábitat acuático, favoreciendo la regeneración de ecosistemas y el filtrado natural del agua.
En el ámbito urbano, puede aplicarse en fachadas, paneles y estructuras portantes, integrando la sostenibilidad en el desarrollo arquitectónico sin resignar calidad.
El equipo de la Universidad de Pensilvania continuará investigando fórmulas que permitan reemplazar el cemento convencional y sumar residuos industriales como aglutinantes, con la meta de ampliar el impacto positivo del concreto sostenible y profundizar la reducción de emisiones.
La innovación tecnológica, el trabajo interdisciplinario y la búsqueda de soluciones sostenibles marcan el rumbo de una construcción comprometida con el ambiente y los desafíos del cambio climático.