Ambiental

Negar el cambio climático es un problema

En la columna ambiental de hoy abordaremos los peligros del negacionismo ambiental y científico para la población.

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EL DIARIO digital

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Por Florencia Srur (*)

Julio de 2023 ha quedado marcado como el mes más caluroso jamás registrado en la historia de la humanidad, y según registros obtenidos a través de métodos paleoclimáticos, es el más cálido de los últimos 100.000 años. Este aumento de temperatura no solo es evidente en los datos medidos por sensores como termómetros, sino que ha sido palpable para la población mundial. Incluso durante el invierno, las conversaciones cotidianas se llenaron de comentarios como "este calor no es normal".

Además de las altas temperaturas, las noticias de inundaciones que cobran vidas en todo el mundo son constantes. Recientemente, una devastadora inundación afectó a la ciudad de La Plata, Argentina, y las sequías extremas del año pasado causaron pérdidas millonarias en el sector agrícola. Estos eventos climáticos extremos están muy lejos de los promedios históricos en términos de precipitaciones y temperaturas para sus respectivas estaciones. Claro que siempre existieron desastres naturales, desde las épocas del antiguo testamento se relatan grandes inundaciones, pero esto es distinto. Este patrón, lejos de ser una ocurrencia aleatoria, se está convirtiendo en la nueva normalidad para muchas personas.

Entonces, ¿por qué existe negacionismo del cambio climático a pesar de la evidencia científica y los testimonios de refugiados y desplazados climáticos? En primer lugar, es importante recordar que en una población mundial de 8 mil millones de personas, nunca habrá un acuerdo universal en todos los temas. Sin embargo, el problema surge cuando los líderes políticos de un país adoptan esta postura, ya que puede tener consecuencias graves. Los gobiernos tienen la responsabilidad de proteger a sus ciudadanos y garantizar su derecho a un ambiente saludable. Esto implica tomar medidas serias para mitigar y adaptarse al cambio climático, con el fin de reducir las pérdidas humanas, económicas e infraestructurales en este contexto global. También requiere el compromiso de abordar este tema a nivel internacional, dado que las consecuencias del cambio climático no son un mito, sino una amenaza real para vidas humanas.

Argentina, como signataria de numerosos acuerdos internacionales relacionados con el medio ambiente, tiene un compromiso internacional y económico en esta materia. Esto, además de la importancia de proteger vidas humanas, también afecta la posición del país en la economía global. Tenemos que recordar que Argentina es parte del mundo y de la economía global y esto significa compromiso y responsabilidad internacional. Los únicos países que no se han comprometido de manera similar en cuestiones ambientales son India, China y Rusia, lo que cuestiona la idea de que el cambio climático sea un invento del socialismo o el comunismo.

Finalmente, en relación con la ciencia, es fundamental reconocer su importancia en el progreso humano. La ciencia es el motor del conocimiento y la formación científica no solo mejora la calidad de vida, sino que nos proporciona una comprensión completa de nuestra existencia en múltiples dimensiones (natural, cultura, social, económico, psicológico y más). No debemos permitir que discursos mediocres nos alejen del camino hacia un futuro sostenible y científicamente avanzado. El progreso está intrínsecamente ligado a la ciencia, y no debemos dar pasos atrás en la búsqueda del conocimiento y la innovación.

(*) Ingeniera en Recursos Naturales y Medio Ambiente. MPN° 365

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