Otro incendio intencional, ahora en el barrio Rucci

General Pico (Agencia) - En poco más de 24 horas se registró el tercer incendio intencional en General Pico, esta vez en el barrio Rucci. Destruyó casi completamente una camioneta y un carro. El siniestro, además, pudo haber terminado en una tragedia.

Una camioneta Chevrolet modelo 1971, enganchada a un carro, fue el blanco de un nuevo incendio cuyas características dan las pautas de un nuevo incendio intencional. Cabe recordar que en la medianoche del lunes pasado dos autos fueron destruidos en el barrio Malvinas.

El propietario de la camioneta, de apellido Sarandón, un jardinero que realiza mantenimiento de espacios públicos para la Municipalidad y trabajos particulares, admitió haber escuchado el estallido de un vidrio a las 4 de la mañana, cuando dormía en su domicilio en calles 302 y 331. En diálogo con EBT, el hombre admitió que no prestó mayor atención al incidente, hasta que un vecino lo llamó porque se incendiaba su camioneta.

Cuando el hombre observaba cómo perdía su herramienta de trabajo, el siniestro se convirtió en otra situación mucho más peligrosa. En la caja de la camioneta había dos tanques de GNC, que no llegaron a explotar, pero el fuego hizo saltar una válvula y el gas generó una enorme llamarada que comenzó a impulsar a la Chevrolet hacia adelante, con destino a un camión estacionado en la vereda opuesta.

Con ayuda de un vecino, Sarandón comenzó a arrojar ladrillos para frenar la camioneta, que continuaba su avance hacia el camión. Recorrió unos 15 metros hasta que finalmente se detuvo a un par de metros del camión y, en ese momento, llegaron los bomberos voluntarios que rápidamente lograron contener la situación.

Si bien ayer por la mañana se aguardaba la pericia de técnicos de Santa Rosa, el damnificado reveló que en el interior de la camioneta encontró una botella rota, que podría tratarse de una bomba molotov arrojada para generar el siniestro.

En la mañana de ayer, mientras el trabajador damnificado lamentaba que el seguro que pagaba no le reconocería los daños, agradeció también la cantidad de llamados que en pocas horas recibió de parte de sus clientes, poniéndole a disposición las herramientas necesarias para continuar con sus labores.