Secuestran drogas y elementos robados en General Acha
Desiderio Cabral se perdió el lunes por la tarde en cercanías del Río Salado. Lo encontró Ariel Salazar el miércoles por la mañana. Lo tuvo que cargar en su hombro por 1.000 metros hasta que lo entregó a la policía y los bomberos.
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EL DIARIO digital
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Salazar contó que se enteró de la desaparición de Desiderio Cabral el martes por la tarde y salió en su búsqueda, pero no lo encontró.
“Fuimos hasta el puesto que está cerca de Emilio Mitre, El Pueblo, y salimos de noche. Estaba muy frío. Volvimos tarde, estaba muy oscuro. Me acosté y, pese a que me tapé con tres cobijas, seguía teniendo frío”, señaló.
Hoy por la mañana retomó la búsqueda y lo encontró cerca de las 9: “iba caminando cerca de la orilla del río cuando vi como un toldito, una choza con un techito hecho de pajas. Ahí adentro estaba Desiderio. Había hecho eso para pasar el frío. En la arena, se veían rastros de manotazos, como que había querido salir, pero se caía”, declaró a Infohuella.
“Tenía mucho frío. Hacía dos días que estaba ahí, sin abrigo, sin nada. Logré sacarlo de ese techito de paja y miré hacia donde estaba el resto de la gente, me separaban como unos dos kilómetros. Grité, pero no me escuchaban, yo me había alejado bastante”, sostiene.
“Estaba solo. Casi que no hablábamos. Como pude, me lo cargué al hombro y, esquivando jarillas y renuevos, me fui acercando hacia donde estaba la otra gente, los policías y los bomberos”, explicó.
“Había caminado como unos mil metros con Esiderio al hombro cuando al primero que me cruzo es al hermano. Se abrazaron y lloraron”, aseveró.
