En la sección Entre Pocillos, el popularísimo vecino santarroseño, Beto Desuque, y su mozo predilecto, charlando como todos los domingos en una céntrica confitería de la ciudad. Como siempre, van y vienen sobre distintos temas cotidianos a los que les suman su particular mirada.
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EL DIARIO digital
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Beto Desuque: – ¡Buenas, buenas, buenas! ¡Salú la barra y que marche el cafecito de siempre, mi querido Fabio!
Mesero: – ¡Betito! Bienvenido, hermano. ¡Qué alegría verte un domingo tan temprano!
Beto Desuque: – Pinta lindo el día, lo quiero aprovechar.
Mesero: – Digamos que estás bien descansadito…
Beto Desuque: – Yo sí, los vecinos de la famosa "Quinta de Nelly" no creo que tanto…
Mesero: – Mirá, justo estaba leyendo en El Diario que el viernes a la noche hubo un casamiento y nadie pegó un ojo en el barrio.
Beto Desuque: – Ya lo hemos hablado, pero no pierdo la capacidad de asombro.
Mesero: - ¡Qué locura!
Beto Desuque: - ¡Y qué locura que la jueza de Faltas de Toay no haga nada!
Mesero: – En El Diario dice que es una tal María Emilia Resina.
Beto Desuque: – No entiendo cómo les cuesta tanto a los funcionarios ponerse en la piel del ciudadano común…
Mesero: – Está demostrado que no les importa nada... Que acá vale todo, ¡viejo!
Beto Desuque: – Además, me dijeron que el dueño de la quinta hasta se muestra desafiante.
Mesero: – Y, claro… Si lo escracharon por todos lados y en la Municipalidad de Toay nadie hace nada, mirá que no se va a mostrar desafiante…
Beto Desuque: – Y te recuerdo que en mi barrio los caballos sueltos andan como si nada, como si los reclamos no existieran, como si no hubiese pasado nada.
Mesero: – Bueno, pero el concejal Mariano Rodríguez Vega dijo que estaban trabajando en el tema… que le iban a encontrar una solución.
Beto Desuque: – Bueno, seguiremos esperando… Pero por ahora, ¡naninga!
Mesero: – Hasta que vuelva a ocurrir otro accidente… Ahí se van a acordar del problema.
Beto Desuque: – ¡Che!, cambiando de tema… ¿Qué te pareció la marcha del otro día contra la Corte Suprema?
Mesero: – Acá vi más gente de la que esperaba… Y en Buenos Aires la verdad que mucha, bastante te diría.
Beto Desuque: – ¿Y de la contramarcha?
Mesero: – Acá nada… Y en Buenos Aires poca, muy poca.
Beto Desuque: - ¡Je!
Mesero: - ¡Qué país somos, Betito! La verdad es que muchas cosas quedan lejos de mi entendimiento.
Beto Desuque: – Del tuyo, del mío y de mucha gente…
Mesero: – Viste que acá todos los poderes instituidos salieron a repudiar la marcha en contra de la Corte.
Beto Desuque: – Sí, vi… Todos los "poderes instituidos", como vos decís. Que en otros temas de relevancia para la sociedad mantienen la boca cerrada y no dicen ni…
Mesero: – Bueno, bueno, bueno... Cuidá la boca y bajá la voz que allá en el fondo tengo a un par de doctores.
Beto Desuque: – Mirá, Fabio... la Justicia en este país tiene más cuentas que rendir que nadie.
Mesero: – A mí me gusta más cuando hablás de corporación judicial…
Beto Desuque: – Igual te digo que en las dos marchas vi cada personaje de un lado y del otro, ¡eh!… Un poco dan ganas de reírse cuando ves quiénes son los que quieren ocupar determinados espacios.
Mesero: – ¿De reírse o de llorar?
Beto Desuque: – Bueno, es cierto… Es todo muy tragicómico.
Mesero: – ¿Y de la renuncia de Máximo qué me decís?
Beto Desuque: – Más que renuncia es un portazo, Fabio. ¡Terrible portazo!
Mesero: – Te digo que esa es otra de las cosas que no entiendo… Supuestamente en el acuerdo con el FMI se nos va la vida y este muchacho emprende la retirada.
Beto Desuque: – Y, justamente creo que viene por ahí…
Mesero: – ¿Por dónde?
Beto Desuque: – Vos dijiste que se nos va la vida… Bueno, quizás Máximo Kirchner tiene un poco más de información que vos y que yo y sabe que lo se viene no es nada nuevo.
Mesero: – No me asustes, Betito.
Beto Desuque: – ¿Vos leíste la carta de Máximo?
Mesero: – Sí, sí… La leí.
Beto Desuque: – ¿Y te pareció la carta de un pibe que juega a la Play o de alguien que puede construir argumentos?
Mesero: – Bueno, todo lo que quieras, pero no me digas que no sabe el quilombo que genera con algo así, y justo en este momento.
Beto Desuque: – Con la carta de Cristina pasó más o menos lo mismo… Ella se cansó de ver una situación que iba a explotar y fue su forma de avisar.
Mesero: – Indudablemente somos un país de marchas y contramarchas.
Beto Desuque: – ¡Marchas y recontramarchas!, Fabio. Donde la cordura política es un bien escaso.
Mesero: – Así parece…
Beto Desuque: – Y hablando de recontramarchas y marchas atrás… ¡¿Qué metidita de pata se mandó la Bullrich con Aníbal Fernández?!, ¿viste?
Mesero: – Esa me la perdí…
Beto Desuque: – La Bullrich quiso asociar el tema de la droga adulterada y el fentanilo, la sustancia con la que supuestamente la mezclaron, con el mentado tema de la efedrina...
Mesero: – ¿Y?
Beto Desuque: – Y, ese tema está asociado con el triple crimen de General Rodríguez.
Mesero: – ¿Y lo quiso pegar a Aníbal?
Beto Desuque: – ¡Claramente! Parece que Bullrich se dio por enterada de que en el último tiempo habían entrado al país grandes cantidades de ese fentanilo.
Mesero: – Bueno, entonces… Dale, aclará que me pierdo.
Beto Desuque: – Resulta que es cierto que en el último tiempo entraron grandes cantidades de ese químico al país, como denunció Bullrich, pero se usa para los pacientes graves de COVID y su trazabilidad está regulada.
Mesero: – Ah, pero mirá vos…
Beto Desuque: – Obviamente que Aníbal aprovechó también para hacer de las suyas y hasta la trató de "boca sucia" a la pobre "Pato".
Mesero: – Argentina país generoso.
Beto Desuque: – Bueno, cobrame el cafecito que emprendo la retirada….
Mesero: – ¿Te vas a hacer el asadito?
Beto Desuque: – No, no, no señor… La carne recién la voy a comprar a partir de esta semana que entra.
Mesero: – ¿Por?
Beto Desuque: – Porque empiezan a vender los "cortes cuidados"…
Mesero: – ¡Ja, ja, ja!
Beto Desuque: – ¿De qué te reís?
Mesero: – De que estás hablando con ironía y te hacés el gil…
Beto Desuque: – ¡Je! Ya lo dijo el secretario de Comercio, Roberto Feletti: "Estamos perdiendo la batalla".
Mesero: – ¿Y qué queda para nosotros entonces?
Beto Desuque: – El control de precios fracasó hace rato, Fabio… No es ninguna novedad, si no no hubiésemos tenido 50% de inflación el año pasado y algo igual o más para este que viene.
Mesero: – Insisto… ¿y qué hacemos nosotros, entonces?
Beto Desuque: – Sobrevivimos, mi querido amigo. So-bre-vi-vi-mos.