Primo Cantariño, una vida apasionada con el golf

Murió Primo Benigno Cantariño a los 82 años. Y con su adiós, quedó un vacío muy profundo en el campo de juego del Jockey Club de Golf.

Primo fue el que propuso, con un determinación y visión, que Santa Rosa merecía tener un campo de golf. Y su idea la trasladó en un diálogo franco, abierto y honesto, con Luis Paturlanne, el presidente de entonces del Jockey Club, con actividades vinculadas a la hípica.

Ante la resistencia de la comisión directiva, Paturlanne le dijo a Cantariño: “Dale, hacela. Cedemos los terrenos. Por lo menos se va a ver limpio el campo”.

La idea tomó forma a fines de los 70 y Oscar Nicora se encargó del diseño de esos primeros 9 hoyos. Nicora trazaría luego, con la familia Cantariño, una estrechísima relación que se mantuvo hasta los últimos días.

“Primo fue el que trajo el golf a Santa Rosa, fue fundador. Con un grupo muy pequeño de colaboradores y socios, tuvo la idea de imponer un campo de juego en la ciudad. Y todo lo que es el Jockey club de Golf, se lo debemos en buena parte a él”, dijo Abel Diez, dolido por esta partida. “Fue una persona excelente, destacable en todos sus aspectos, humano, como jugador de golf… Junto a Enrique Di Liscia, Alberto Campos, Pocho Severino, Raúl Pacheco León, Víctor del Carril, Pedro Zubillaga, Verónica Fantini, Jorge Cardelli, Tito Maza, el Vasco Garmendia, Pablo Pérez Bernadou que fue el primer presidente, impulsaron la cancha”.

Cantariño llegó desde Bahía Blanca, donde había sido caddie y conocía los secretos de este deporte como pocos. Fue el que sembró la primera semilla en este juego cuarenta años atrás. Un visionario y, a su vez, un apasionado. “El Jockey Club de golf le debe mucho a Primo por todo lo que dio y lo que representó para el deporte. Hoy es, para todos, un día de mucho dolor”.