La Pampa

No se agrega valor: no hay empleo de calidad

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La Pampa exporta, en su enorme mayoría, productos primarios sin procesos adicionales.

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EL DIARIO digital

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La dependencia de los destinos de exportación y la primarización de las exportaciones provinciales no son un asunto novedoso, pero en todo caso lo revelador es que esa tendencia no se modifica, y al contrario parece ir en aumento. Y una de las consecuencias más gravosas de no agregar valor localmente es que no se generan puestos de trabajo de calidad.

El año pasado, en el seminario de posgrado Exportaciones Agroindustriales 2020, "indicadores para pensar el futuro", quedó bastante clara cuál es esa realidad en la provincia.

Si bien surgen de ese trabajo algunos datos alentadores, porque La Pampa había sido en ese 2020 una de las pocas provincias que incrementó sus ingresos por exportaciones.

En ese contexto se advirtió entonces que el peso de los productos sin agregado de valor en el caso de La Pampa era relativamente muy grande: el 75% se exporta como producto primario sin procesos adicionales (cereales, oleaginosas y en menor medida, miel a granel). Al año siguiente aumentó: ahora supera el 82%.

En 2020, el 24% de las exportaciones pampeanas fueron manufacturas de origen agropecuario, donde las carnes y sus derivados representan la gran mayoría.

Apenas cerca del 1% eran manufacturas de origen industrial y poco menos se exportaba por la zona franca de General Pico. Los destinos más importantes de las exportaciones provinciales fueron en esa ocasión, igual que ahora, China y los países asiáticos, seguidos por Magreb y Egipto, Unión Europea y MERCOSUR.

La Pampa ya presentaba indicadores que expresan una dependencia importante de los destinos que demandan materias primas sin agregado de valor. A contramano de la evolución nacional, el 72% de lo exportado son cereales y oleaginosas a granel, sin procesar.

Ese ciclo estuvo coordinado por la Facultad de Agronomía y otras instituciones del medio. El seminario estuvo a cargo de Santiago Ferro Moreno, Mariano Roberto y Santiago Perez, docentes-investigadores de la Licenciatura en Administración de Negocios Agropecuarios de la Facultad de Agronomía y CONICET.

Los profesionales advirtieron que el hecho de no agregar valor localmente implica no generar puestos de trabajo de calidad en la provincia y exportar esas posibilidades a otros países. Las exportaciones con valor agregado están lideradas por el complejo cárnico, seguramente uno de los más evolucionados a nivel provincial. "La Pampa debe idear y ejecutar de manera sostenida estrategias y políticas que potencien el agregado de valor local, generen puestos de trabajo de calidad y amplíen y diversifiquen los mercados internacionales", plantearon.

A nivel nacional

Con la mirada puesta sobre el nivel nacional también se hizo una advertencia sobre un proceso de caída. La interanual –en el especial contexto de la pandemia- en 2020 fue del 15,7%, cortando un proceso de crecimiento de 5 años. En el período 2007-2020 la caída de las exportaciones de bienes fue del 1,35%. La tendencia de evolución es negativa y muy volátil, por la alta dependencia de los precios de las commodities y los factores agroclimáticos, señalaron los profesionales.

La cantidad de empresas que exportan en Argentina viene en franco descenso, a una tasa de 414 empresas menos por año. En trece años han dejado de exportar en el país unas 5.378 empresas, la gran mayoría PYMES. El 85% de las exportaciones las realizan grandes empresas, la concentración es tal que las 20 empresas más importantes explican el 54% de las exportaciones.

Los principales destinos son los países asiáticos, que demandan en gran parte materias primas y solo pocas empresas son las que les venden. En líneas generales, una parte muy importante de las exportaciones de Argentina dependen de pocas empresas y pocos destinos.

En 2020, la venta de alimentos y bebidas explicó el 52,3% de las exportaciones, en su gran mayoría (67%) en manos de aceiteras de soja, un sector muy concentrado en pocas empresas exportadoras.

Los complejos alimentarios y agroindustriales explicaron 7 de cada 10 US$ exportados en 2020. La soja fue el principal producto exportado, con un 39,1% del total, en su mayoría como aceite y harina. Le siguen el maíz (más del 90% sin agregado de valor), la carne y derivados bovinos, el trigo y el complejo pesquero.

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